7 cosas que tienes que saber sobre el sexo después del matrimonio
Se habla muchísimo sobre sexo después del matrimonio, mitos que ya hemos desmentido, pero sobre todo, existe una creencia de que nuestra vida sexual deja de ser tan plena una vez que nos casamos; y eso depende muchísimo a los que le llames plenitud; lo que es verdad, es que tu vida cambia, y por eso aquí te dejamos siete cosas que tienes que saber sobre el sexo después del matrimonio:
1. El sexo post-matrimonio es lo que tú hagas de él:
Es verdad, muchas parejas dejan de tener relaciones sexuales al mismo ritmo que cuando eran novios, pero muchas otras no, al contrario, empiezan a tener más y mejores.
Muchas relaciones empiezan con un ímpetu sexual muy fuerte y acelerado, y con el paso del tiempo, esto puede ir cediendo, y no por otra cosa más que la pareja se conoce mejor, se conocen en más cosas y pueden darle más prioridad a otras actividades; sin embargo, conocerse también es un factor que puede hacer de tu vida sexual como casadx sea la mejor que hayas tenido en tu vida
¿De qué depende? De miles de cosas, la estabilidad emocional, económica, si decidieron tener familia, sus tiempos libres, el estrés del trabajo, el desarrollo profesional y personal, etcétera… pero con todo esto, la vida sexual en pareja tiene 6 ingredientes:
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Comunicación: saber expresar lo que queremos, lo que nos gusta, lo que nos imaginamos, lo que nos prende y lo que no nos encanta, además de aprender a escuchar y a experimentar. Es súper importante que hables con tu pareja sobre esto sin miedo, con apertura, honestidad y muchísimo amor y comprensión.
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Atracción: aquí no estamos hablando sobre lo que se conoce como “belleza” sino sobre que una persona te guste. Y es que estamos acostumbrados a entender el mundo con un solo tipo de belleza, ¡y no es así! Es como la comida, cada quién tiene gustos diferentes, y seguro antes de casarte sabías que esa persona te gustaba. Mantener esa atracción es fundamental.
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Tener citas: es común que en los noviazgos, las citas terminen en sexo, y si ahora no tenemos citas, a lo mejor sentimos que no tenemos el momento adecuado para empezar el forplay; por eso, es importante que mantengan las salidas, se sigan conociendo y disfrutando tanto como antes.
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Afecto diario: y cuando no estén en citas, cuando estén en lo más cotidiano de lo cotidiano, procura ser afectuoso. Miradas, palabras, detalles y tacto, preocuparnos por su vida y por todo lo que es.
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Ponte en el mood: y sí, a veces es sólo cuestión de empezar.
Candle & Quill Photography
2. Debes darte un tiempo en tu agenda:
Suena raro, pero es importante darnos un tiempo, y además, priorizarlo. La vida en este mundo es un ir y venir de pendientes del trabajo, de la casa, y si tienen hijxs, también de lxs hijxs; y nunca terminan; por eso, si estás esperando un tiempo de tranquilidad para tener relaciones con tu pareja, es difícil que exista el momento ideal. Por eso, tómense un tiempo y cúmplanlo.
3. Más te lleva a más y menos a menos:
Las hormonas siempre hacen lo que quieren con nuestros cuerpos y con nuestras vidas, por eso, no nos sorprende que la respuesta hormonal ante un estímulo sexual nos lleve a tener más deseo, y por otro lado, cuando no tenemos relaciones, puede ser que no tengamos ganas orgánicamente.
Es importante que te hagas estudios de perfil hormonal para estar seguro de que tu cuerpo está produciendo todo lo que necesitas para una vida plena.
4. Aprende el lenguaje de amor de tu pareja:
No siempre estamos en el mood, y eso es algo que puede venir de factores externos a la relación, como el trabajo o las responsabilidades, de factores intrapersonales, como tristeza o inseguridad, y de factores internos de pareja. Esto último se puede resolver hablando y conociendo la manera en la que nuestra pareja percibe el amor; a algunos nos ganan con palabras, a otros con detalles, con tacto, con regalos, etcétera.
Aprender esto, nos va a ayudar a estar siempre en un ambiente de amor romántico y eso facilitará comenzar una interacción sexual.
5. Hay subidas y bajadas (pun intended):
Es importante que sepas que, que estés en un momento de baja frecuencia sexual, no significa que así vaya a ser siempre. La vida nunca estática, y nuestras experiencias y emociones tampoco, por eso, hay etapas en las que podemos estar muy bien con nuestra vida sexual, y etapas en las que no. Date calma, no interpretes ni creas que será para siempre. Háblenlo, compartan lo que sienten y, si lo necesitan, busquen ayuda.
6. Revisemos de dónde viene la falta de líbido:
Reflexionar en torno a lo que hacemos, pensamos y sentimos, es una práctica fundamental no sólo en este sentido, sino en todos; cuando notemos que está bajando nuestro líbido, revisemos de dónde viene, si se trata de algo emocional, físico y cómo podemos tomar cartas en el asunto.
No dudes en buscar a un especialista para ayudarte a lidiar con lo que sientes.
7. No te sientas forzadx:
Esto puede incluso ser contraproducente, cuando no quieras relaciones sexuales, no te sientas forzadx porque tu pareja quiera. Háblenlo, busquen una solución si es que es algo más profundo y caminen hacia una vida más plena juntxs. El sexo forzado nunca es opción.
¿Hay alguna otra cosa que te hubiera gustado haber sabido antes de casarte? ¡Comparte con nosotros en los comentarios!
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